Hace años un niño, por ejemplo escupia encima de un coche y el dueño o cualquier viandante tenía derecho a rectificarle su conducta dándole un sopapo, que como su nombre indica es un golpe aplicado por la zona baja del papo.
El dueño del coche podía darle incluso un pescozón y si su padre se enteraba de dicho desliz podía aumentar el castigo a un par de bofetadas.
En la escuela el maestro, aplicaba sus afamados métodos de "la letra con sangre entra" y si un alumno por poner un caso decía que no había asistido a la Santa Misa el Domingo (Dies Dominicus), Día del Señor, pobre de él pues le caían encima una ristra de ensayados golpes que le dejaban maltrecho para todo el día.
Faltas de ortografía, dos palos en las manos, no saber conjugar un verbo en todos sus tiempos a demanda del enseñante que no pedagogo, tres correazos en el tafanario.
Hoy en día es todo lo contrario y el infante (infans, infantis), viene a ser como las vacas en la Indía, algo sagrado y da lo mismo que sea madre y que no sienta los ruidos porque.....
No recordaba que estaba prohibido hablar de algunas profesiones y sus "fallos".....
Aurea Mediocritas.
Un Saludo.
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