¡Hola a todos!
No sé si funcione, porque no se gran cosa acerca de los mecanismos internos de lectura de discos compactos y las funciones de programación de bajo nivel relacionadas con esto, pero hace algún tiempo, allá por 1995, cuando comencé a «sentir el deseo de alcanzar el Mundo Superior» (concuerdo con el
Diccionario Zorrilla de Términos Cabalísticos 
), implementé algo maquiavélico con mis programas de instalación (compilados por una belleza conocida como
Turbo Pascal 7) en discos flexibles de 3 1/2:
1. Rayaba ligeramente el disco con una navaja.
2. Leía los números de los sectores que quedaban defectuosos.
3. Guardaba esos números como constantes en mi programa instalador.
4. Copiaba el programa instalador en el disco literalmente marcado.
5. Al ejecutar el instalador, éste verificaba el daño en los sectores indicados antes de iniciar el proceso de instalación.
Entonces (y quizá todavía) ninguna máquina de fabricación masiva era capaz de reproducir con exactitud el daño físico de un disco sobre otro.
Sin embargo hoy en día mi postura es hacia una
paz positiva: servicios de valor agregado a los clientes leales y el fomento de licencias de software más accesibles y de precios más justos, según el poder adquisitivo del comprador.
Un abrazo freeware.
Al González.
