Quien no se ha equivocado .... (encuesta)

[andres1569]

Empezado por Al González

Esto que les voy a contar me da un poco de vergüenza, pero viene mucho al tema.

(...)

Un abrazo olvidadizo.

Al González.

Pobre Roberto, pero ¡cómo me he reído con esta historia, Al! aunque a él no le hará ni pizca de gracia Creo que le toca a él usar Google con ingenio, usando términos como "fotos", "Sierra Tarahumara", "2006", "cabrón de la Sierra" para tratar de dar contigo ... y que compruebe que fue un lamentable error del que quieres resarcirle, o esperar a que Google ponga en marcha su buscador facial que le permita (o a tí) encontrar esa imagen suya que has colgado (parece Freddy Mercury, ¿a que sí?)

Ahora me estoy imaginando la cara que te debió quedar al ver el mensaje de Windows , también llegué a pensar que al pasar las fotos desde la tarjeta de la cámara, éstas se habían perdido en el limbo, pero veo que Windows hizo una copia local ¡uff!


Respecto al título del hilo, recuerdo hace años una vez en que estuve al borde de una gran "cagada" (no por culpa nuestra sino de una utilidad que se empleaba para restaurar tablas Paradox estropeadas): mi socio de entonces me llamó desde las instalaciones del cliente cuyas tablas se habían corrompido. Ni corto ni perezoso le dije que pasara dicha utilidad (no recuerdo bien el nombre de la utilidad pero ya una vez lo reporté en ClubDelphi en el subforo de Tablas Planas, esta utilidad se basaba en una librería .dll que no preguntaba por la contraseña, de haberla, y el resultado final era que llenaba las tablas de símbolos raros, por lo visto Paradox cifra las tablas con contraseña y esa .dll actuaba sin descifrarlo previamente). Tras pasar la utilidad y esperando que me diera buenas noticias, entró al programa y me contó que todo eran garabatos (todo ello con el cliente de espectador). Me puse blanco, morado y de todos los colores ... afortunadamente mi socio (con años de experiencia) había hecho una copia previa de las tablas, pero el sofocón me duró unos días, sobretodo imaginando la impresión que se debió llevar el cliente al ver aquello, hasta que investigué el problema y me dediqué a darle la debida publicidad. Se quedó en anécdota

Saludos